El valor de tus nefronas.

A veces, cuando te enteras que pasan ciertas cosas en el mundo, te dan ganas de echarte a llorar. Lo peor es que no te enteras, si no que otra vez te has quitado las manos de delante de los ojos y las has vuelto a poner, tapando esa realidad tan difícil de soportar.

Es realmente desgarrador:

«Vendo riñón, pido 10.000 dólares y no tengo vicios»

ElPais.com

(creo me voy a dejar alguna asignatura para septiembre)